2 Mientras hierve la pasta preparamos la salsa de queso. En una olla pequeña a fuego medio derretimos manteca y se añade harina. La calentamos ligeramente removiendo y añadimos la leche sin dejar de remover para que no se hagan grumos.
3 Dejamos que hierva dos minutos y vamos añadiendo poco a poco los quesos, siempre revolviendo para que de a poco se vayan fundiendo y convirtiendo en un líquido espeso. Añadimos unas pizcas de pimienta y mezclamos una última vez y mantenemos caliente.
4 Cuando la pasta esté en su punto, la escurrimos y la volvemos a la olla. Se le agrega la salsa por encima, se mezcla bien, y listo para servir.